Tipo de piel: Aprende a identificarla fácilmente

TIPO DE PIEL SECA

Todas queremos tener una piel sana, sin imperfecciones y luminosa, pero no a todas las personas nos sirven la mismas estrategias y rutinas del cuidado del rostro. Por eso es muy importante que conozcas e identifiques cuál es tu tipo de piel y así podrás cuidarla con productos específicos para ti. No todas las pieles necesitan los mismos cuidados ni tienen las mismas necesidades a tratar.

El tipo de piel se determina básicamente por la genética.

El tipo de piel se determina básicamente por la genética, pero su apariencia puede variar considerablemente según diferentes factores internos y externos.

Bella, recuerda que independientemente del tipo de piel que tengas, es indispensable cuidarla diariamente con 4 pasos básicos: limpieza, tonificación, hidratación y protección. Recuerda que lo que hagas hoy por tu piel lo verás mañana. ¡Comencemos!

Tipo de piel seca:

La piel seca suele sentirse áspera, tirante y opaca. A las pieles secas suelen aparecerles líneas de expresión con mayor facilidad y tienden a tener mayor sensibilidad e irritación, por eso se deben cuidar con productos adecuados para este tipo de piel, y sobretodo productos muy hidratantes, ya que estás pieles no retienen agua.

El cuidado de la piel seca es diferente, ya que según su grado de sequedad se deben usar productos libres de alcohol que hidraten y protejan más.

Tip:

Bella, es importante que hagas mucho énfasis en el contorno de ojos y de los labios con productos específicos hidratantes. Estas zonas son las más afectadas en estas pieles secas.

También puedes ayudarte de algunos ingredientes naturales como por ejemplo, aceite de argán, manteca de karité, glicerina y urea son algunos de los mejores principios activos para este tipo de piel.

En cuanto al maquillaje, todos los productos deberían tener activos minerales muy hidratantes, que no resequen tu piel y te ayuden a mantenerla humectada todo el tiempo.

Tipo de piel grasa:

La piel grasa al ser más gruesa y resistente tiende a tener menos líneas de expresión, pero los poros están más dilatados y son más visibles. Este tipo de piel se caracteriza principalmente por tener tendencia al acné, poros grandes y brillo en todo el rostro.

Lo ideal para el tipo de piel grasa es que tengan una buena rutina del cuidado de la piel. Especialmente limpiarla en la mañana y en la noche, y usar un gel control de imperfecciones.

Bella, sin importar si la piel es grasa se debe hidratar siempre, pues si no lo hacemos tratará de compensar esa falta de hidratación y producirá más grasa en tu piel. Finalmente no olvides proteger la piel con protector solar no graso, especialmente si tienes acné. En caso de que tengas demasiado acné te recomiendo que visites un Médico Dermatólogo para que te analice y te lleve un buen proceso.

Tip:

La rutina de limpieza facial diaria es vital para minimizar los poros y la aparición de acné o lesiones que pueden terminar en manchas molestas que tardan meses en desaparecer.

Bella, utiliza cosméticos que sean ideal para el tipo de piel grasa con activos que controlen la grasa y renueven la piel, como por ejemplo, el retinol y los ácidos glicólico y salicílico.

Si te maquillas, opta por texturas en polvo y mate en lo posible para mantener a raya el brillo en tu piel.

Tipo de piel sensible:

El tipo de piel sensible se caracteriza por irritarse o enrojecerse fácilmente por factores externos como por ejemplo, el clima, alergias, alimentos y productos cosméticos con ingredientes altamente irritantes. Algunas pieles son más propensas a ser sensibles que otras, especialmente las pieles secas.

Tip:

Bella, te recomiendo que identifiques cuáles son los irritantes para tu tipo de piel sensible como por ejemplo, exfoliantes agresivos , jabones,  productos con fragancias y alcohol, entre otros, para así evitarlos al máximo en tu rutina del cuidado de la piel sensible. Elige cosmética hipoalergénica, libre de sustancias químicas e irritantes.

Siempre asegúrate de utilizar productos suaves e ideales para este tipo de piel. Evita el estrés, el alcohol y ambientes con mucho calor o alimentos con picante, ya que propician la dilatación de los vasos sanguíneos y podría causarte reacciones en tu piel.

Tipo de piel mixta:

Ya que es una mezcla de ambos tipos de piel.
Fuente: Tomada de Consultora de Imagen

Tiene los mismos problemas y virtudes que el tipo de piel seca y grasa, ya que es una mezcla de ambos tipos de piel.

El cuidado de la piel mixta puede ser un poco confusa y molesta, pues tenemos partes en el rostro con más grasa como por ejemplo en la zona T (frente,  nariz y mentón) y otras más secas como en las mejillas, contorno de ojos y alrededor de los labios .

Bella, debemos tratar las zonas secas y al mismo tiempo controlar las zonas con tendencia a la grasa.  No te preocupes no es misión imposible.

Gracias principalmente a la ciencia y la tecnología, en el mercado hay infinidad de productos y soluciones para tratarla como se lo merece.

Tipo de piel normal:

Es una piel bien equilibrada. No tiene tendencia al acné, manchas, brillo y tampoco es opaca y seca.
Fuente: Tomada de Conectiva

Es una piel bien equilibrada. No tiene tendencia al acné, manchas, brillo y tampoco es opaca y seca.

La piel normal tiene una textura suave y sin impurezas, no es sensible y tiene un color uniforme. Es una piel muy luminosa y sana.

Tip:

Cuidar tu piel con una buena rutina la mantendrá linda, luminosa y sana. La piel normal no necesita cuidados especiales, se recomienda tomar abundante agua para mantenerla hidratada, incluir frutas y verduras en la dieta y es muy importante dormir entre 6 y 8 horas para una buena regeneración celular. ¡Tu piel te lo agradecerá!

La prevención es la mejor arma para mantener a raya los signos visibles del paso del tiempo, el envejecimiento.

Bella, si aprendes a identificar cuáles son los puntos débiles de tu piel, en función de tu tipo de piel, sabrás qué cuidados son los más imprescindibles para mantener tu piel fabulosa y envejecer con dignidad.

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